Hoy es 14 de julio de 2006.
Día de la Revolución francesa.
Estoy en la Ciudad de París.
No, no voté. Pero si lo hubiera hecho habría votado por el Peje, desde luego. No porque lo consideré el mejor candidato, sino porque si de retrocesos hablamos, pienso que es más fructífero un retroceso al siglo XX, que al siglo XVII.
Ganó la derecha, el Yunque, los empresarios conservadores... y un ejército de lumpenburgueses erectos en flamante clase media mexicana. Clasemedieros de rancio abolengo, unos de rancia derecha también, heredaron su confesión de sus abuelos y bisabuelos y la ejercen porque sí, porque así les enseñaron, otros no son de tan rancia prosapia, son hijos del sistema educativo privado y son, ante todo, profunda y groseramente ignorantes. A ellos como a muchos mexicanos les comieron el seso desde la radio y la TV diciéndoles que si ganaba el "violento" Peje les iban a quitar un carro para regalárselo a un pobre que no trabaja. No sé qué pensar de alguien quien cree algo así puede ocurrir en las actuales circnstancias de México: bueno, sí sé qué pensar: que está bien pendejo.
En fin, que desde acá la cosa parece una anécdota de ranchito cacahuatero. A decir verdad, es intrascendente quién gane o cómo, México ya va encaminado en la engrasada máquina del neoliberalismo y no hay nadie quien lo desvíe. En los USA el Peje es considerado de izquierda moderada por los analistas, pero en México, para los Servitjes, Azcárragas y demás, cualquier pálido rosa ya es rojo profundo. No me gusta ver a mi país tan timorato, y tan inconsciente, no me gusta ver a las "buenas conciencias" celebrando el "triunfo" (fraude a todas luces) de Calerón exclamando frases tan poco deportivas como: "¡Qué bueno, pinche bola de nacos!". Luego de verlos así, tan... desnudos... tan poco... dignos. Me entran ganas de que si hay chingadazos, regresarme a volar dos tres bancos, vaciar dos tres cavas privadas, reducir a astillas dos o tres BMW's y violar dos tres señoras de Las Lomas con hijas fresas incluídas (si son católicas, mejor).
Pero estoy en París... es verano, las francesas visten ligerito y son hermosas.
Viendolas caminar por Grand Boulevards uno no puede menos que despreciar profundamente a México.
No comments:
Post a Comment