4.8.06

Crónica de castas VI

La sociedad de castas es una idea que nace del intento de controlar lo evidente e ineludible: la gran diversidad social. Y en una sociedad como la novohispana, esta diversidad no solo era palpable sino que se multiplicaba en la medida en que las diferentes castas se mezclaban e iban dando nuevas castas. Desde luego, los primeros interesados en que esta división se mantuviera eran los que estaban hasta arriba de todas las castas, los españoles y criollos que gozaban de la gran parte de privilegios.

Las castas de abajo no eran muy partícipes de cambiar las cosas: negros, indios, mulatos, mestizos, todos, también venían de sociedades muy jerarquizadas y estaban muy lejos de concebir la idea de igualdad entre los seres humanos. Salvo los indios, que venían de un pasado inmediato con identidades estables, en el resto de las castas inferiores en el cuerpo social, no existía, por decirlo de alguna manera, "conciencia de casta". Esta falta de "conciencia de casta" era importante para conservar la "paz social", si bien se dieron revueltas en la Nueva España, estas fueron a causa del hambre, nunca con un sentido social ni político, fueron simples estallidos que la turbamulta aprovechaba para externar el rencor acumulado y saquear graneros, pero de ahí en fuera, nada de qué preocuparse: pan y circo y todo arreglado, mucha manga ancha a los comerciantes, tolerancia a las asociaciones comerciales informales, muchos Autos Sacramentales, mucha fiesta en el Zócalo, pero sobre todo, mucho ataque a la propagación del conocimiento entre la plebe: las principales actividades de la Inquisición en la Nueva España era la sanción civil, la observancia a la conversión de curanderos y líderes indígenas, y la fiscalización de los libros en la ciudad que editaba mayor número de libros en su época. La sociedad novohispana reforzó la Iglesia y la religión, y coptó la educación, reservándola solo para aquellos que pudieran pagarla. ¿Les suena familiar?

Podemos entrar en detalles, pero esto es un blog, no el Colmex, y para irnos rápido, diremos que una razón de Estado en la Nueva España era garantizar la falta de conciencia social en las castas.
La lumpenización de la sociedad era una razón de Estado.

A veces con la mejor intención del mundo, eso hay que reconocerlo, los encargados de estas tareas eran los humanistas monjes, que por un lado se empapaban de la cultura indiana al grado de que actualmente, la gran mayoría de lo que conocemos, se debe a el registro que elaboraron estos frailes, quienes incluso elaboraron el primer diccionario castellano-nahuatl de la historia, y por otro lado promovían entre los indios la sumisión absoluta a la fe, también en nahuatl. Es mentira que hubiera persecusión cultural, al indio se le requería integrado, y esa integración se dió en todos los niveles hasta el punto en que los mismos dioses acabaron fusionados en un proceso que aún no termina en México, el estira y afloja que desde la SeGob ha llevado el católico Abascal para no reconocer el culto a la Santa Muerte [link] tiene que ver con esta administración de la integración, con esta constante negociación de la sociedad barroca en donde los cultos diversos pueden existir, pero solo se integrarán plenamente los que se alinien a los intereses del poder.

Tenemos la idea generalizada a través de los libros de texto escolares, que el indio sufría del racismo español; es relativo, si bien sufría discriminación, el indio no fue apartado del resto de la sociedad, solo se le restringió el acceso al poder. Eso es todo. En México no existe la segregación, sino simplemente, permea la idea, de que las "castas" inferiores no tengan acceso al poder. Pueden participar todos, pero los "nacos" no pueden, no deben tomar la batuta de nada, es un "peligro" para el statu quo. Y para ello se echa mano de todo el arsenal ideológico de la sociedad de castas, se finge igualdad donde solo existen castas con reglas escritas y no escritas, reservadas a cada casta.

Un virrey novohispano, al recibir las reformas del Rey y ser exhortado a cumplirlas, contestó sonriente:
"Su Alteza, aquí las leyes se acatan, pero no se cumplen"

Desde ahí viene nuestro "Estado de Derecho" donde al final cada quien busca torcer la vía institucional, acatando leyes que nadie cumple desde los privilegios que le concede su casta. Hoy digo "resitencia civil", y mañana, "no, tú no puedes usar esa resistencia"[link], hoy digo "Bando 13" y mañana "no me acuerdo"[link], hoy digo "transparencia y democracia" y mañana pongo a mis incondicionales a contar los votos [link]. Hoy me voy yo a la "resistencia civil" y mañana si otro quiere irse será un "renegado" o un "violento" [link]. Todas estas contradicciones se generan por el intento real de mantener la inmovilidad social: que los banqueros y carreteros, aunque administren mal sus negocios, no caigan por ello en la escala social, y se mantengan ricos entre los ricos, y para que los "nacos", nunca lleguen al poder, aunque sea por la vía democrática. Es decir: para que cada casta se quede en su nicho. La casta que busca desbancar a la que sigue solo busca suplantar privilegios, de la misma manera que los criollos hicieron al desplazar a los españoles finalmente en 1810[link].

En La Rebelión en la Granja, George Orwell escribe:
"Todos los animales son iguales, pero algunos animales son mas iguales que otros"

Esta estrategia que busca fingir avances democráticos e integradores donde en el fondo pulsa el pensamiento medieval de prevalecer a costa del que se piensa inferior, es de uso corriente en la sociedad de castas. Si este pensamiento no se modifica desde su raíz, las instituciones que surjan después serán adecuadas para ser adoptadas y adaptadas para coexistir, pero sin cambiar el metabolismo de la sociedad de castas.

6 comments:

Hilus Anendorf said...

Es lo que yo veo FASCINANTE del momento político actual en México, más allá de quién ganó: el choque de dos bloques históricamente encontrados y que se ven las caras sólo en momentos climáticos (guerra de independencia, guerra de Reforma, Revolución), y que aún ganando los "plebes", como en las tres anteriores, nunca pueden imponerse en el poder, siempre terminan gobernando o dominando los "criollos", y todo vuelta a lo mismo. La plebe lleva 3 victorias y al mismo tiempo, muy a la mexicana, 3 derrotas (Bretón estaría feliz). Este conflicto actual que crece y crece en belicosidad por ambos lados, es inquietante por imprevisible, quién sabe qué se desate o hasta donde se llegue, nadie puede saberlo. igual y se desinfla o lo desinflan de alguna manera, o escala aún más. Estamos en una situación inédita en tiempos post revolucionarios, y en muchos signos me recuerda al 68, no el de la matanza, sino el del movimiento en sí, la manera en que fué creciendo sin que nadie imaginara hasta dónde iba a llegar. Y ya ves, fué un parteaguas para nuestro País. Yo estoy expectante, montado en una perspectiva histórica y no partidista (blahg), y es por eso curioso la pertinencia y actualidad de este post tuyo. Nuestras vueltas circulares en redondo, que no?

Edgar Clement said...

No, mi flaco... malas noticias. Según mi lectura, no va a pasar nada.
Ganarán los criollos y seguirmos estando en el siglo XVII, de donde no nos hemos movido...

:(

Mi rollo es, básicamnete un llamado a resistir con el Peje, pero con plena conciencia de que hay más qué hacer, de que estar con él, que ya es atraso, solo es para evitar un atraso mayor... mas al rato le sigo con el blog, cuando me toque hablar de protestantes, masones y liberales, ahí verás de qué estoy hablando.

Bef said...

Mi querido Dément:

Lúcido, como siempre. Demoledor, de acuerdo a tu estilo, esta desmitificación de la grandeza mexicana pone en claro muchas cosas, entre otras el eterno enfrentamiento entre liberales y conservadores al que muchos quisieran atribuir, según su conveniencia, las etiquetas de bien y mal.

Se agradece tu análisis en momentos en que, como señalaste en un comentario a mi blog, sólo parecemos vernos el ombligo, no sólo como capitalinos o mexicanos, sino en nuestro momento histórico.

Coincido con lo que dices, de acuerdo aesta lectura, el bien de la izquierda volverá a perder contra el de la derecha, entre otras cosas por que, al igual que quienes presuntamente defendían a los indios, han enarbolado a lo pobres y comerciado con las esperanzas de éstos en aras de los más mezquinos intereses.

Por favor, no dejes de visitar mi blog y siéntete como en tu casa para comentar lo que quieras. Considérame asiduo al tuyo.

Un saludo.

Bef

PD: Sé de un texto tuyo sobre un simio que escribe un ensayo, imagino que en el tono del "Reporte a la academia" de Kafka. Me gustaría leerlo, ¿hay manera de que lo rescates aquí?

mundito said...

Clement.
El análisis que haces me confunde.
No me queda claro si te refieres al ejercicio del poder en ese modo de producción o al proceso histórico del país.
La desigualdad social, el privilegio económico, el sometimiento de la ley a los intereses de la gente en el poder (plebe o adinerada) no es privativo de este modo de producción o proceso histórico al que haces referencia, es una característica del ejercicio del poder.
Yo, a diferencia de Luis Fernando, creo que el proceso histórico no da vueltas CIRCULARES en REDONDO, sino en espiral y creo también que el ejercicio del poder ha tenido casi los mismos elementos durante todos los modos de producción (incluido el de la sociedad de castas) y también durante todas las etapas históricas de éste país.

Parafraseandote yo diría:

Si este pensamiento no se modifica desde su raíz, las instituciones que surjan después serán adecuadas para ser adoptadas y adaptadas para coexistir, pero sin cambiar el metabolismo del EJERCICIO DEL PODER.

Saludos de edmundo.

Edgar Clement said...

El ejercicio del poder se modifica según los modos de producción, que van evolucionando según el momento histórico.
Digo, no son lo mismo, pero no se puede hacer una lectura de uno sin tomar en cuenta el resto.

Y pos sí, hay que modificar este pensamiento, pero primero entendiendo de dónde partimos, si no, vamos a cometer las mismas pendejadas que los liberales mexicanos...

ya llegaré a ese punto.

Abrazos.

Edgar Clement said...

Bef:

El monólogo de El Gorila, lo tengo por ahí, está mocho, y ahora que lo releo le hacen falta precisiones, en una de esas abro otro blog para montarlo todo.

Quisera hacerlo libro, pero es un bue nde chamba. Igual y habría quye pedir otra beca.

:P