Esperanza inútil...

Creer que el mainstream se podía dar una puñalada por la espalda es creer en los Santos Reyes... y hay quien cree en ellos. Todo fenómeno contracultural surgido del mercado nunca sale de él, en todo caso solo reorienta el mercado o crea nuevos nichos de mercado, pero no logra escaparse a él.

Léanse estre librito. Muy revelador.
Lo único quie no me gustó es que se fueran recio contra The Wall, cuando creo que The Wall estaba en la misma sintonía que los autores de este libro. Pero como sea Heath & Potter tienen la boca llena de su razón.

ab originem The Matrix no puede ser contracultura; sin embargo el alegato contestatario sugería apuntar a cualquier cosa menos a terminar formando un manual del perfecto empleado corporativo: zen para los esclavos cibernéticos, en eso desembocaron Reloaded y Revolutions tampoco es lo que me esperaba. Un despropósito de esa envergadura solo puede suceder cuando sus autores han decidido voluntaria o involuntariamente dar un cambio radical a su rollo. Y lo dieron, al final los Hermanos Wachowski se entregaron al complejo de Cypher y se entregaron al aparato que decían combatir: esa es la razón por la que creo que Reloaded y Revolutions son prescindibles, al menos para mí.

Además de la información tras bambalinas, que seguro la debe haber, lo que me hace ver cómo estos autores terminaron rebasados por su propuesta no está en The Matrix, sino en The Animatrix.

Ocho relatos, muy bien desarrollados por ocho de los mejores directores de animación de Japón y Estados Unidos. Lo mejor de los proyectos que se hicieron después de The Matrix, pero al ver los especiales del DVD nos damos cuenta que muchos de los directores deidieron colaborar solo is se les permitía intervenir en los relatos propuestos por los Wachowski, y otros de plano dijeron que querían escribir la suya. El resultado, desde mi particular punto de vista, es en profundidad, muy superior a Reloaded y Revolutions.

Cuando los Wachowski permitieron que otros directores aportaran nuevas ideas a su universo, el universo se enriqueció. Una de las propuestas más inquietantes fue la de Peter Chung: ¿qué pasaría si una máquina paticipara de una simulación hecha por humanos?

La idea sonaba interesante: la confontación con la otredad, con el otro, con lo otro, como en el descubirmiento de América, el reto es ver qué tanto se puede ser con ese otro...

Van spoilers: la idea de que un robot, una Inteligencia Artificial, se pueda "enamorar" de un humano abre una posibilidad inquietante. Sí, sí... ya sé que el tema no es nuevo, pero ya quedamos en que con The Matrix no hay nada nuevo, primero, y segundo: me propongo releer The matrix.

Esta parte, es una idea original de Peter Chung, él mismo lo dice en los especiales del DVD, no es un aporte Wachowskiano, al dar libertad al aporte de ideas ajenas en el universo de The Matrix dió resultados potenciadores. Quizá la falta de promoción y difusión que tuvo The Animatrix demuestre que a fin de cuentas era un producto "menor" en la estrategia de mercado, pero a fin de cuentas la más profunda ya no en sus implicaciones intelectuales como The Matrix, sino incluso en sus posibilidades filosóficas. En cambio Reloaded y Revolutions, a todas luces más controlados, se colapsaron en un juguete que pretende entretejerse y coincidir con el tejido simbólico inicial, pero que tiene un claro fin: la anulación de la carga contestataria de The Matrix.

Puede ser... o puede que no.
Como sea, la alegoría me parece más armónica eliminando las secuelas.

En algún momento una idea sensata me pareció la sugerencia de la Inteligencia Artificial como una extensión de lo humano, la obra de los Wachoeski se basa en el llamado Complejo de Frankenstein, y a mi parecer The matrix contenía los elementos que nos permitían sospechar la integración hombre-máquina y su eminente conflicto. Para explicarme me permitiré antes comentar y recomendar dos libros, que quizá muchos ya han leído: El primero es Los Dragones del Edén: Especulaciones sobre la evolución de la inteligencia humana, de Carl Sagan.

Reseña en la Wikipedia, el libro se consigue facilito.

En Los Dragones del Edén, Sagan nos informa de los avances en neuroanatomía en aquellos setentas, y los relaciona con dos de las teorías emblemáticas del siglo XX: La teoría evolucionista de Darwin y la teoría sicoanalítica de Freud. Los neuroanatomistas han estudiado el lugar donde se alojan determinades funciones cerebrales, y han descubierto que el cerebro está formado por estructuras que coinciden con otras estructuras cerebrales animales, el que estas estructuras estén dispuestas por capas desde la más "primitiva" abajo, hasta la mas "avanazada", arriba, hace pensar en la teoría evolutiva.

Así, le cerebro humano se forma de "tres cerebros":

El cerebro reptílico...
o complejo reptílico:
Consta de las partes más primitivas del cerebro: el bulbo raquídeo
Que compartimos con los reptiles. Ahí se generan las emociones más primitivas, el instinto puro y duro. La preservación, la "voluntad de dominio", el sentido de las jerarquías... los militares vienen a ser muy reptiles.

El cerebro mamífero.
o sitema límbico:
Que desarrollan los mamíferos. En ese punto se encuentran las emociones afectivas, el espíritu gregario, la capacidad cerebral de soñar, y la líbido: el espíritu romántico.

Y el neocortex:
Que es la última capa en la evolución cerebral, donde están las circunvoluciones tan carecterísticas del cerebro, mientras más profundas las circunvoluciones es mayor la capacidad de desarrollar capacidad de abstracción y de elaborar operaciones matemáticas. Básicamente: dudamos con el neocortex.

A grosso modo éste es el planteamiento del libro, el nombre del libro alude a los reptiles embozados que somos, deambulando por el paraíso terrenal... :P ... el otro libro que recoemiendo es El cuerpo transformado: Cyborgs y nuestra descendencia tecnológica en la realidad y en la ficción, de Naief Yehya.

Una joyita, de veras, se agota seguido pero lo siguen reeditando.

Ya no los mareo con tanta chora, pero para mí fue una pieza fundamental para releer The Matrix, en su advertencia, Naief Yehya nos introcduce al libro, se las dejo para que lo paladeen. Y solo un parrafito para que vean por donde va el rollo, sobre todo con respecto a la tecnología.

No es objetivo de este ensayo extenderse en las características y peculiaridades de este sistema económico [el pancapitalismo], pero sí es importante señalar que la tecnología, al igual que el arte, es un reflejo de la sociedad que la produce, por lo que no es un fenómeno neutral ni está fuera de control ni es una fuerza autónoma, como suelen presentarla algunos tecnófilos.

Denle click para ver el choro de la advertencia completo.

Agur.